Trayectoria

¿Qué hago yo aqui?

Del 28 de octubre al 27 de noviembre 1999
Exposición

Qué hago yo aquí, el grito de auxilio que Rimbaud lanza por carta a su familia desde Eritrea, es el punto de partida de éste proyecto, una reflexión plástica sobre el final del milenio y sus implicaciones sobre nuestra realidad más inmediata, una propuesta que pretende revisar el concepto del milenio asociado al tiempo histórico que vivimos. Que hago yo aquí es la última producción de la Asociación ARTE FACTO.los parques de atracciones para construir las ficciones realistas de las nuevas urbanizaciones-refugio que prometen una vida-sedante, deshuesada de conflictos, sonriente y trivial. Esta promesa de seguridad analgésica tal vez tenga que ver con el epíteto apocalíptico que anima todo fin de milenio.

En resumen, el malestar de la modernidad, la comercialización de la fantasía y la popularidad de las ficciones temáticas apoyan su proliferación en el próximo milenio. Si estas son las opciones para el diseño de lo público, del espacio de lo visible, cabe preguntarse de nuevo qué fue de lo privado, del terreno íntimo de la trastienda que el avance de la modernidad recluye y amuralla. La escenificación de lo público alimenta la transgresión del actual modelo de ciudad, que es cada vez más urbe
despoblada que civitas cosmopolita.

El objetivo de Que hago yo aquí reside en la búsqueda del escenario ideal en el ámbito de lo privado. El lugar de exposición funcionaría así como modelo de refugio en el marco de la ciudad. Con ello, pretendemos realizar una muestra en la que los artistas diseñen su propio recinto de domesticidad, tanto en un espacio cargado de significado como en otro carente de toda referencia.

Hubo un tiempo en que lo real se distinguía claramente de la ficción, en
que los espacios de ficción: ferias, teatros, cines, parques de atracciones, zoológicos, estaban bien delimitados, y en ellos, la ficción imitaba lo real. Hoy, una de las tendencias más inquietantes se expresa precisamente en una curiosa inversión: lo real se viste de ficción, el monumento se disfraza de decorado.

Esta escenificación de lo real, deriva hacia un todo/ficción que diluye la distinción entre ilusión y realidad. Recientemente, los arquitectos de Disneyland han sido elegidos para remodelar el centro de Nueva York, revitalizar la Quinta Avenida y animar el Central Park. En Europa y Asia se multiplican los parques temáticos. Todo ello, remite a la proliferación del simulacro en el mundo contemporáneo, pero también al carácter engañoso de la percepción de la realidad y a la naturaleza falsa o fingida del modus vivendi actual.

Quizá por eso no puede sorprender que la más ambiciosa realización del nuevo urbanismo haya sido precisamente una promoción de la compañía Disney: Celebration, un conjunto urbanístico propuesto como prototipo de una revolución comunitaria que utiliza su experiencia en las realidades ficticias del celuloide y en los parques de atracciones para construir las ficciones realistas de las nuevas urbanizaciones-refugio que prometen una vida-sedante, deshuesada de conflictos, sonriente y trivial. Esta promesa de seguridad analgésica tal vez tenga que ver con el epíteto apocalíptico que anima todo fin de milenio.

ARTISTAS

• MERCEDES PRADO. Instalación
• CONCHA PEREZ. Instalación
• FAST FOOD. (colectivo). Instalación.
• EL PERRO. (colectivo). Pintura e instalación
• ÓSCAR SECO. Pintura.
• MATEO MATÉ. Instalación.
• ANTONIO DE LA ROSA. Pintura e instalación
• YOLANDA MORENO. Arquitecto.
• GONZALO MAYORAL. Instalación.